Identificar y analizar estrategias de adaptación e integración que elaboran artistas migrantes provenientes de Venezuela, habitantes de la ciudad de Bogotá, es el objetivo de la investigación que hace parte de la línea Territorios, Migraciones y Diásporas, coordinada por la investigadora Cindy Sierra. 

El trabajo se centró en cuatro artistas venezolanos: una pintora, un bailarín, un músico y un dibujante, quienes contaron, a través de entrevistas, los hitos de su vida, su experiencia migratoria, de integración y adaptación a la sociedad bogotana. 

A partir de allí se concluyó que el oficio o profesión de las artes les ofrece una posibilidad de integración social, entendida como la forma en que las personas se incluyen dentro de un sistema productivo económico y cultural diferente al propio, pero dicha inclusión en la industria cultural bogotana depende de los medios productivos y el capital social del que disponga, así como de la forma en que sea percibido o percibida por el resto de la sociedad.

“Las clases sociales del gremio artístico en Bogotá están fuertemente jerarquizadas y curiosamente lo encabezan migrantes y lo terminan migrantes. Por ejemplo, los migrantes europeos y estadounidenses poseen las galerías, la tecnología, los estudios de producción (visual, plástica, musical, etc.), las conexiones internacionales con los mercados de alta rentabilidad y las bienales”.

Es decir, “la industria de las artes plásticas en Bogotá la mueven extranjeros, pero extranjeros deseados, críticos, historiadores, coleccionistas, productores o aficionados al arte europeos, estadounidenses o cualquier persona de cualquier otro país cuyo gusto se distinga del mayoritario. Mientras, las y los migrantes de clases media y/o trabajadora proveniente de Venezuela agremiados(as) con artistas colombianos y de otras nacionalidades del Sur Global, hacen parte tanto de la fuerza laboral artística de base como de su ejército industrial de reserva y realizan otros oficios relativos al acompañamiento artístico como limpieza, alimentación, logística y similares”.

Por lo tanto, recomienda la investigación que tanto los artistas, la administración pública de las artes, la integración social, y el resto de la sociedad civil, contribuyan a democratizar los medios para su producción, así como los espacios de divulgación y la promoción de las redes de cooperación entre migrantes.